Archive for the ‘democracia’ Category

Los españoles creen que los políticos son corruptos y no tratan de cumplir sus promesas electorales

agosto 20, 2007

La mayoría de los encuestados por el CIS opina que los ciudadanos no tienen «ninguna influencia» en la vida política

Europa Press , Madrid | 19/08/2007

 

 

 

La mayoría de los españoles opina que los políticos están relacionados con asuntos de corrupción y no cree que diputados y senadores se esfuercen por cumplir las promesas que han hecho durante la campaña electoral, según se desprende de una encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).

Ante la pregunta de cuántos políticos están implicados en cuestiones de corrupción, un 52% de los encuestados señala que bastantes o casi todos, mientras que otro 26,2% señala que lo están algunos.

Los españoles se dividen casi en dos mitades entre los que se confiesan poco o nada interesados en la vida política (50%) y los que sin embargo sí lo están (40%). En lo que sí coinciden es en vincular política con corrupción y en la creencia de que diputados y senadores no se empeñan en realizar las promesas que han hecho en la campaña electoral: el 60% asegura que no se esfuerzan en cumplirlas.

Los españoles opinan también mayoritariamente (el 60%) que las personas como ellos no tienen «ninguna influencia» en la labor del Gobierno y que el ciudadano medio no influye en la vida política.

Los funcionarios, mejor vistos

Los ciudadanos relacionan igualmente a los funcionarios públicos con la corrupción, aunque en menor número que a los políticos: el 34% piensa que son bastantes o casi todos, mientras que casi la mitad de los encuestados cree que se trata de algunos o pocos funcionarios.

El 90% de los españoles asegura sin embargo que «nunca» se ha encontrado con un funcionario público que le pidiera algún favor o soborno a cambio de un servicio. Sólo un 3,1% de los encuestados responde que esta situación se le ha presentado «a veces».

Es también mayoritaria (82%) la opinión de que el trato que recibe la gente de los funcionarios varía según los contactos que se tengan, aunque el 42% de los españoles añade que casi siempre o a menudo los funcionarios le tratan de manera imparcial.

ADN.es

Las hermanas de Puig Antich creen que los tribunales y el estado democrático no hacen «nada» para revisar el caso

junio 21, 2007
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BARCELONA, 21 Jun. (EUROPA PRESS) –L’última nit de Puig Antich

Las hermanas de Salvador Puig Antich consideraron hoy que los tribunales y el estado democrático no hacen «nada» para revisar el juicio del joven anarquista, más de 30 años después de su muerte a garrote vil.

Imma, Montse, Carme y Merçona Puig Antich señalaron en un comunicado que si en 1973 un Tribunal Militar representó «una farsa de juicio», ahora «con una democracia teóricamente consolidada y con un poder judicial que tendría que ser independiente» existe «la misma situación».

Las hermanas Puig Antich remarcaron que los abogados han presentado una amplia batería de pruebas nuevas con argumentaciones contrastadas, además de nuevos testimonios. «Las pruebas de la defensa de Salvador que en su día no se realizaron o no se aceptaron, ahora están sobre la mesa de la sala quinta militar del Supremo. De ellos dependía un acto reparador de justicia y no lo han querido así», aseguraron.

Ante esta «indefensión decepcionante», cuestionan «en qué se diferencia aquel sistema dictatorial» y «este sistema democrático que no hace nada para cerrar heridas que todavía supuran». «Después nos pedirán que nos olvidemos del pasado y que miremos al futuro. No podremos nunca», añadieron.

La familia Puig Antich agradeció las muestras de apoyo recibidas por parte de numerosas personas y colectivos, a la vez que aseguró que continuarán en su lucha «hasta que un día se reconozca la profunda injusticia que se cometió» en la condena a muerte de Salvador.

Democracia, por Occidente

junio 19, 2007

Los líderes del «mundo civilizado» alabaron la convocatoria a elecciones en los territorios palestinos en enero  2006. Iban a ser unas elecciones libres y democráticas, y lo fueron. Los observadores internacionales no vieron nada anormal, Ismail Haniyano hubo nada que objetar al resultado. Sin embargo, desde entonces nuestros dirigentes olvidaron que se supone que son los promotores de la libertad y la justicia, los heroicos mandatarios que llegaron a invadir Iraq solo para llevar a sus habitantes la democracia.

Hamás, el Movimiento de Resistencia Islámico, ganó de manera aplastante las elecciones más democráticas de Oriente Medio. Los palestinos, hartos de que Fatah se quedara con las ayudas internacionales, votaron a quienes invertían en políticas sociales y ayudaban a los refugiados sin formar parte del gobierno y pagándolo de su propio bolsillo.

Y entonces Occidente olvidó la democracia. Retiró las ayudas económicas que daba a la ANP, impuso un bloqueo económico al nuevo y legítimo gobierno palestino y permitió a Israel congelar los fondos que pertenecían a éste y atacar impunemente la franja de Gaza. Hamás, al cabo de un tiempo, renunció a parte del poder que le habían concedido las urnas y accedió a formar un gobierno de coalición nacional junto con Fatah para terminar con el bloqueo.

Pero Occidente se mostró intransigente de nuevo, y Mahmoud Abbas, controlado a distancia desde la Casa Blanca, se las ingenió para crear una situación explosiva que desembocó en una corta guerra civil en la que Hamás se adueñó de toda la franja de Gaza. Abbas, en un auténtico golpe de Estado, creó un gobierno palestino alternativo formado exclusivamente por medio de su partido, aquel a quien el pueblo había echado del poder ejerciendo sus derechos constitucionales.

AbbasY Estados Unidos y la UE respondieron. Anunciaron ayer el reanudamiento de las ayudas económicas que habían suspendido a principios del año pasado porque no les gustó lo que el pueblo palestino había decidido. Premiaron a Abbas por su jugada dictatorial, por hacer lo que más le conviene a sus intereses personales y no a los del país del que es presidente. Y los garantes de la libertad, la democracia y la justicia demostraron que esas palabras que tanto citan para justificarse, para invadir países, para alabar a unos y castigar a otros, no son para ellos más que una útil tapadera con la que maquillar sus verdaderas intenciones.

Palestina está ahora más dividida que nunca, con una empobrecida Gaza controlada por Hamás y Cisjordania bajo el poder antidemocrático de Fatah. Y esto es consecuencia de las políticas occidentales, las mismas que hace sesenta años originaron esta situación dividiendo en dos el territorio de Palestina.

Mayo del 68, o cómo una revolución se quedó en nada

junio 8, 2007

Mayo francésLos móviles del Mayo del 68 fueron los mismos que causaron las revueltas sociales de la época en Estados Unidos: la discriminación racial y social, el descontento estudiantil y, sobre todo, la voluntad de frenar al imperialismo norteamericano en Vietnam. Para el viejo Sartre aquello era el comienzo de la «sociedad basada en la democracia plena, en la vinculación entre socialismo y libertad».

Todo empezó cuando estudiantes del campus de Nanterre (París) se movilizaron para conseguir la entrada en las residencias del otro sexo. La intransigencia de las autoridades no hizo más que dar la razón a quienes denunciaban la naturaleza represiva del sistema. El malestar desembocaría en la creación del Movimiento del 22 de Marzo, dirigido paor Daniel Cohn-Bendit y de ideología izquierdista, aunque más próximo a la tradición ácrata que al Partido Comunista Francés, del que desconfiaba bastante. El Movimiento se basaba en el rechazo de la autoridad y el orden establecido.

A principios de mayo la revuelta se convirtió en un verdadero problema de orden público. Se cerró la Universidad de Nanterre y se ocupó La Sorbona. La posterior intervención policial desembocaría en una batalla campal en el Barrio Latino la noche del 11 al 12. El carácter represivo se mostraba de nuevo.

Entonces los sindicatos franceses hicieron un movimiento genial. Se incorporaron a la revuelta y convocaron una huelga general que paralizó toda Francia. Lo que había empezado como una simple protesta cada vez se parecía más a una revolución. Muy importante fue también la gran repercusión mediática que los sucesos tuvieron en todo el mundo. La atención de los medios era tal que una simple pintada en un callejón del Barrio Latino podía recorrer el mundo en pocas horas, convirtiéndose en una consigna para cualquier movimiento contestatario (Prohibido prohibir).

Mayo del 68Desgraciadamente, los hechos que se desarrollaron hacen muy difícil poder hablar de revolución en el sentido marxista del concepto. El día 27, mediante la firma de los acuerdos de Grenelle, los sindicatos se vendían al Gobierno a cambio de mejoras salariales. De Gaulle había conseguido romper el frente revolucionario. El día 30 una multitudinaria manifestación recorría los Campos Elíseos en apoyo al presidente, y el mismo día éste anunciaba elecciones anticipadas para el mes de junio. A lo largo de ese mes la situación se fue normalizando, y se desalojaron los últimos reductos del Movimiento, mientras que el gaullista RPR conseguía una victoria aplastante en las presidenciales. La revuelta había fracasado.

Ni el movimiento obrero, atraído por los estudiantes pero receloso de su carácter pequeño-burgués, ni los estudiantes, con una espontaneidad y una falta de organización desastrosas, supieron convertir aquello en una revolución. Los líderes del Mayo del 68 (incluso el propio Cohn-Bendit, que llegaría a ser diputado en el Parlamento Europeo) acabarían plenamente integrados en la sociedad que quisieron transformar, demostrando que «escandalizar al burgués es mrevolutionucho más fácil que acabar con él».

Así, lo que podía haber sido una revolución que convirtiera a Francia en una potencia comunista pero democrática (y con potencia nuclear), una revolución que podría haber cambiado el curso de la Guerra Fría y de la Historia, se quedó en un breve momento de utopía, en un romántico pero insustancial capítulo de los sesenta que se disuelve en las arenas del tiempo.

El capitalismo

May 21, 2007

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El capitalismo es un sistema social. En el capitalismo hay unos que tienen dinero y muchas posesiones y otros que no tienen nada sino su fuerza y su conocimiento, y los que tienen el dinero (los capitalistas) mandan y los que solo tienen su capacidad de trabajo obedecen.

Esos pocos que tienen grandes riquezas no las han obtenido honradamente, sino de explotar el trabajo de muchos. El capitalismo se basa en la explotación de los trabajadores, es un sistema que premia y pone como ejemplo a los ladrones.

Además de explotar y robar, el capitalismo reprime, encarcela y mata a todo el que se rebela contra la injusticia, es decir, contra el sistema.

Las mercancías son uno de los pilares del capitalismo, ya que cuando se compran y se venden dan dinero. Debido a esto, el capitalismo lo convierte todo en mercancías, ya que para él todo puede comprarse y venderse. Y las mercancías tienen otra gran utilidad, ya que sirven para esconder la explotación del pueblo. Las mercancías se compran y se venden en el mercado, que sirve para comprar y vender, pero también para ocultar la explotación. En el mercado, el otro pilar del capitalismo, vemos mercancías, pero no la explotación de los que las hicieron. El capitalismo necesita muchos mercados, pero ahora se le han quedado pequeños y busca un mercado enorme, un mercado mundial.

El capitalismo actual no es igual que el capitalismo de antes. Está en un paso que se llama Globalización Neoliberal. Esta globalización significa que a los capitalistas no les basta con dominar a los trabajadores de uno o varios países, sino que tratan de dominar todo en todo el mundo.

El neoliberalismo es la teoría del capitalismo salvaje contemporáneo. Es la idea de que el capitalismo está libre para dominar todo el mundo. El neoliberalismo es el plan que sigue la globalización capitalista. Básicamente, de lo que trata el neoliberalismo es de dominar a todos.

En la globalización neoliberal, los grandes capitalistas de los países poderosos quieren convertir el mundo en una gran empresa y en un gran mercado, para comprar y vender y para esconder la explotación de todo el mundo. La globalización neoliberal es una guerra de conquista de todo el mundo que hace el capitalismo para dominar mundialmente. A veces es con ejércitos que invaden países débiles, los conquistan y los esclavizan. Pero como la conquista por las armas está mal vista y ayuda a abrir los ojos de la gente, la mayoría de las veces la conquista se hace mediante la economía. Los capitalistas invierten su dinero en otro país o se lo prestan con la condición de que obedezca lo que ellos ordenen. Esta invasión económica es la más terrible, porque cuando el capitalismo entra en un país entran también sus ideas y su cultura capitalista, que es la cultura de la mercancía, la ganancia y el mercado.

Al instalarse en un país el capitalismo neoliberal destruye lo que no le sirve, que son los que no producen, ni compran ni venden, o los que se rebelan al sistema. Y a esos que no le sirven, los desprecia o los elimina. El capitalismo neoliberal quita también las leyes que no le permiten explotar o que limitan sus ganancias. Poco a poco, la globalización neoliberal destruye todo lo que hace que un país sea un país. La globalización liberal quiere destruir a las naciones del mundo para que solo quede una, el país del dinero. Y lo que es diferente a lo establecido por el capitalismo es perseguido.

Abajo y a la izquierda

Pero los explotados de cada país no se conforman, y dicen NO, y se rebelan. Y resisten y no dejan que los eliminen. Aunque todas éstas resistencias individuales no pueden hacer frente a largo plazo al capitalismo, por lo que, igual que hay una globalización neoliberal, debe haber una globalización revolucionaria, una revolución de la rebeldía y la resistencia que luche contra el capitalismo e instaure la justicia, la democracia y la libertad. Unidos todos los movimientos de resistencia anticapitalista será posible, y se cumplirá aquello que dijo una vez Marx de “trabajadores del mundo, uníos”.

Basado en la Sexta Declaración de la Selva Lacandona del EZLN

¿Democracia?

May 21, 2007

Dudas y temores sobre el sistema perfecto

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¿Qué es la democracia? El sistema de libre mercado nos vende la idea de la individualidad frente a la de la masa de otros sistemas políticos. Pero ¿qué poder tiene el individuo en la democracia? Una sola voz, que pronto es ahogada por los gritos contradictorios de la multitud. Una voz que, por si fuera poco, solo puede utilizar cada cuatro o cinco años.

La democracia no cumple los deseos del pueblo. Cuando un político invade un país o privatiza un servicio público no pide su consentimiento a los ciudadanos. Tiene el poder y lo utiliza sin miramientos.

Solo hay un momento en el que al político le importan los deseos y esperanzas del pueblo, y es cuando hay elecciones. Es decir, cuando el lobo necesita a los corderos. Ese día que se supone es el cúlmen de la civilización occidental solo porque podemos decir que partido preferimos. No podemos elaborar una lista de reformas que desearíamos, ni sugerir una línea de gobierno. Ni siquiera elegir a la persona que queremos como presidente de nuestro país. Solo podemos votar a un partido. Y luego, el Partido decide.

Se nos vende un sistema poco eficiente porque (supuestamente) hace recaer el poder en el pueblo. Pero ni el obrero alienado, ni el campesino explotado, ni el trabajador temporal, han llegado a ver ese poder ni de lejos. ¿A quién beneficia entonces la democracia? A los de siempre. El sistema liberal es el más beneficioso para quitarle al pueblo su patrimonio, desde las grandes empresas estatales hasta la misma tierra.

El poder recae en el pueblo y el comunismo es una dictadura, pero en el primero el hombre es una mercancía en un mundo en el que todo tiene un precio, en el que el gobierno impone a los más la ley de los menos. En el segundo el Estado lucha por igualar a todos los ciudadanos y defender los derechos, la justicia y los bienes de los ciudadanos de las garras del capitalista. Pero, por supuesto, nuestro sistema es el mejor.

Desde los albores de la civilización los que han tenido el poder lo han ejercido con la única limitación de no enfadar al pueblo hasta el punto de que éste se rebele. La Roma Imperial esclavizaba a sus súbditos pero les llenaba los ojos de conquistas y del supuesto orgullo de ser romano. Los reyes cristianos de la Edad Media llevaban a unos hombres destrozados por la explotación de los nobles a morir al fin del mundo, diciéndoles que era para defender la verdadera fe y prometiéndoles el Cielo. Las sucesivas constituciones españolas concedían pequeñas reformas para contentar a un pueblo harto de Austrias y Borbones, pero cuando una se pasaba de liberal, era rápidamente sustituida por otra conservadora que suponía un enorme paso atrás. No fue hasta 1931 cuando se hizo una Constitución para el pueblo y, los poderosos, viendo que no podrían eliminarla con las armas que ellos mismos habían creado, no tuvieron más remedio que recurrir a la fuerza bruta.

Y la cosa no ha cambiado en absoluto, por mucho que nos lo repitan. En pleno siglo XXI, el presidente de Estados Unidos recorta libertades y se da la posibilidad de obtener poderes dictatoriales. En pleno siglo XXI, nuestra “avanzada” nación sigue gobernada por un niño mimado que cree tener la sangre azul. En España solo hay un camino para llegar a ese aún inexistente sistema en el que la soberanía realmente pertenezca al pueblo. El camino de la República, que se recorre ejerciendo nuestra única forma de poder ante el sistema: la abstención masiva.